jueves, 20 de marzo de 2008

un mal rato.

y por fin,
como quitarse unas gafas absolutamente negras.
por fin puedo ver hacia otras direcciones.
me encuentro entre literales basuras.
renuncio, no lo quiero, no los quiero,
no me sirven.
la petición para todos es que esten lejos.
la verdad es demasiado usual que me equivoque de esta manera.
lo poco usual es que me tardara tanto en notarlo.
estoy borrando nombres de mi cabeza, de mis listas mentales
de mis listas de memoria.
se quedan ahí , se quedan como recuerdos entre estas
callesitas de pueblo con sabor a solterita y a naranjado
sin tardes de lluvia.
solo quiero esos cuatro grandes ojos verdes.
eso es lo que necesito para estar bien.
y claro tal vez salir a volar un poco.
eso me caería demasiado bien.